Con la firme intención de planificar en terreno la mantención de las vegas en la zona protegida de Piuquenes, hace algunos días una delegación de regantes de Cuncumén se trasladó hasta ese sector al interior de Los Pelambres.
La visita comenzó con los primeros rayos de sol saliendo tras el macizo andino y fue cosa de preparar las monturas de los animales -que a la postre harían el trabajo más pesado de la larga jornada- para que las remembranzas que estaban a flor de labios comenzaran a inundar el ambiente.
Es así, ya que los campesinos del anterior milenio, cuando la RCA N°38 no existía, realizaban lo que llamaban el riego de las vegas, desarrollando atraviesos y tacos de canales lo que permitía inundar ciertos sectores donde luego proliferaba el pasto que servía de alimento para el ganado de diverso tipo. En ese tiempo, la mayoría de los que hoy visitaron la zona, eran solo unos niños.
Mira aquí un video de la actividad.
“El manejo de vega es bien complejo en general. Hay distintas experiencias tanto buenas como no exitosas, pero acá tenemos la experiencia de lo tradicional que hay que ver si es posible implementar en el marco de las restricciones vigentes, en consecuencia hay una oportunidad para manifestarles a las autoridades pertinentes la opción de mitigar los efectos de la sequía”, dijo Juan Pablo Rubilar, jefe de Recursos Naturales y Patrimonio de Minera Los Pelambres.
En tanto, Elías Villalobos, regante de Cuncumén, señaló que “desde los 10 años, cuando nos traían nuestros padres, que nosotros veníamos a esta zona para regar las vegas y esa es la mejor manera para mantener estos sectores tan preciosos. Es algo que se hacía y que se debe seguir haciendo”.
La iniciativa, que busca desarrollar un trabajo de mantención de áreas donde abunda la vegetación y la fauna como por ejemplo los guanacos, es una de las muchas instancias que se trabajan en la Mesa del Agua, conformada por regantes, miembros de la comunidad y ejecutivos de MLP. Con el mismo fin, el sector de Río Blanco también fue visitado con anterioridad.
Lo que viene, es desarrollar un plan de manejo y ensayos fuera del área protegida, cuyos resultados serán presentados en conjunto a las autoridades.
Creo que falto resaltar de forma visual los desagües existentes por medio de los cuales se realizaba el regadío de estas vegas y que permitía mantener buenas espantadas en este sector, que permitían hacer engordas de ganado para la venta, esto estaba inserto en un plan de explotación de lo que era la Cooperativa signataria que existia en esos años y que le permitía obtener buenos resultados en las engordas de ganado, ademas se puede apreciar las acequias por donde se conducían las aguas hasta el sector donde existían empastadas de alfalfa lo que permitía incluso cortar pasto y guardarlo en la alta cordillera, el tratar me mejorar estos bofedales, no implicaría Intervenir la flora existente ya que existen y están los cauces que a pesar de los años se encuentran totalmente operativos, y solo hay que mejorar los tacos o mini bocatomas existente y que están un poco dañadas por el paso de los año y de los animales que pastorean en el sector (guanacos) en su mayoría, de poder trabajar esta idea y concretarla, seria beneficioso para la conservación de estos maravillosos bofedales, y a la vez recuperar un pulmón hidrico muy importante que existía cuando se manejaba por la comunidad, y esto beneficia no solo para las comunidades de aguas, sino que tambien a la minera la que es propietaria del 70% de las aguas, ademas se le estaría devolviendo la vida a este sector tan importante del macizo andino, para bien y no para mal.